Siempre en el mismo contexto:
la esperanza del quizás,
la expectación de la divina ayuda
que no llega,
y siempre en el mismo contexto,
volver una y otra vez
sobre la pregunta
que se repite como las olas:
¿hasta cuándo?
Hasta cuando soy yo
y hasta cuando eres tu
sin posibilidad
de ser un nosotros.
De esta insensatez
Que es sólo mía,
¿hasta cuándo?
Hasta cuando de esta cuerda floja,
de esta historia sin tiempo,
de esta posibilidad sin excusas,
de estas miradas inocuas,
hasta cuando de todo
este sin sentido.
Bueno, te espero;
que otra cosa
me puede quedar
por hacer
en este contexto,
en donde el cariño
no pierde la gracia,
pero pierde el tiempo.
"Bueno, te espero;
ResponderEliminarque otra cosa
me puede quedar
por hacer
en este contexto,
en donde el cariño
no pierde la gracia,
pero pierde el tiempo."
A veces ese esperar es eterno.
Hola don/ña buscando respuestas... me carga lo eterno, es una palabra que mejor se la dejamos a los cristianos.
ResponderEliminarEstamos aquí y ahora... hay que enfrentarse...
Habrá que enfrentarse al aquí y transformar el ahora.
ResponderEliminarDon/ña buscando respuestas, habrá que enfrentarse a nosotrxs mismxs, para transformar el aquí y el ahora que en definitiva siempre son otrxs-cualquiera.
ResponderEliminarLa batalla más larga es con uno mismo, pero jamás alejada de la transformación de la vida.
ResponderEliminaramén... qe sería de c/u alejados del vértice social?
ResponderEliminarsaludos don/ña buscando respuestas, espero que no haya encontrado ninguna por acá.
no seriamos nada.
ResponderEliminarLas respuestas no las busco acá, solo sirve para encontrar más preguntas que responder.
Saludos.
no sería la idea andar entregando respuestas... sólo anecdotas
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